En Aragón han aprobado una nueva ley llamada ‘Ley de igualdad en las relaciones familiares ante la ruptura de convivencia de los padres‘. Dice El País que «esto es igualdad«, porque esta Ley «obliga a las parejas a negociar el reparto equitativo de responsabilidades»… y así… «permite que hombres y mujeres sigan responsabilizándose de la educación de sus hijos tras la ruptura de la pareja».
Yo aquí veo un pequeño problema lógico, y es que para SEGUIR hay que HABER EMPEZADO previamente. Nunca es tarde para empezar, dirán algunas personas. OK, digo yo, ¡empecemos cuanto antes! O sea, cambiemos urgente y radicalmente las leyes para que, a partir de ahora, las mujeres y los hombres que se casan sepan que deben cuidar exactamente lo mismo; y que cada persona debe ser independiente económicamente en todo momento. O sea, como dice Lkstro, iniciemos reformas legislativas para la igualdad total. ¿No parece lógico establecer las reglas de juego antes de comenzar el partido en lugar de cambiarlas en medio de la bronca?